Los valores de la sociedad

Tras la muerte de sus padres, Mowgli, un niño de apenas dos años, queda abandonado en la selva y es recogido por una manada de lobos. En el seno de la manada, Mowgli es criado como un lobo más hasta que crece y empieza a desenvolverse por sí mismo en la selva. ¿Será capaz de superar todos los obtáculos que le irán surgiendo? Para ello, Mowgli cuenta con la ayuda de la pantera Bagheera y un oso holgazán, Baloo.
 Esta película cuenta mucho más que eso, y tiene un trasfondo educativo muy importante: se refleja cómo un niño es capaz de aprender de los demás animales a valerse por sí mismo y a entender la vida desde diferentes perspectivas. Baloo enseña al joven a divertirse mientras aprende a moverse por la selva; Bagheera le hacen ver la importancia de estar alerta y ser responsable; Akela y la manada de lobos le muestran cómo formar parte de una manada y ser consecuente con ello. En definitiva, muchos aspectos de la vida cotidiana de cualquier persona que se enseñan en un contexto bien distinto.
Hay que destacar la influencia de este clásico en  en el Movimiento Scout, que engloba un conjunto de valores como herramienta educativa. Dentro de este movimiento, existe una unidad compuesta por los Lobatos, y que conforman la Manada. Son educados conforme al   Libro de la Selva. Con correspondencia a la historia original, Akela es el jefe de la manada, y los demás scouters que ayudarán a los niños a afrontar la vida desde la pedagogía scout, representarán a los distintos animales del cuento (Baloo, Bagheera, Hati, Rachsa, etc.).
En definitiva,  esta historia no solo es una producción cinematográfica que, como la gran mayoría, me ha fascinado. También es un modelo de vida que es utilizado para educar a los más pequeños con algunos de los valores más importantes en la sociedad.